CAPÍTULO XXXVII -Dicen que a lo mejor rebajan la edad, que los van a llamar con catorce años. Quien así habló era un cornetín de 12 años, que se había unido, sin estar alistado, acuciado por el hambre y la necesidad de comer diariamente, un precoz buscavidas que se movía tanto por cocinas como por intendencia. -Más carne para el carnicero si los adiestran como a nosotros –aseguró Joaquín sin levantar la vista de la carta que estaba escribiendo. A Mateo también le habría gustado escribir alguna carta. A sus padres era imposible, pero sí a Rosa y a Luz, mas por miedo a que ésta fuera descubierta por su culpa prefería abstenerse. No respondió al comentario de su amigo y se esforzó en no pensar en Jordi, pero no pudo evitarlo. Su mente visualizó otra vez el ataque del tabor de regulares con las bayonetas caladas centelleando a la... >> Leer más

PASTÓS Y ZAGALAS(Poema cheso) Autor: Veremundo Méndez Coarasa Pastós y zagalasla mula y lo güeen un portal sonque claman Belén,mirando lo crío,plegau de nacer, lo Fillo de Dios,del Cielo lo Rey,itau en pesebrede pobre que ye,faxau con pañáls,bien limpio y calién.Engüelto’n la pallalo lame lo güe,lo lamié la mula y frío no habié.Lo Niño s’arríe:que tañen por Elpastós y zagalaspanderas,rabéls.María lo mira,lo mira Jusé:s’arríe lo críocon risa de Rey,de Rey de los Cielosque a todas las chensdará vida eterna si creyen en El.¡Pastós y zagalas,panderas tañer!